Cualquier pincel de acuarela consta de tres partes: mango, virola y el pelo.
El mango. Es la parte que sirve al acuarelista para sostener y manejar el pincel.
La virola. Es una funda metálica que sujeta y une el mechón de pelo al mango.
El pelo. Es la parte que se utiliza para extender la pintura y por la que se diferencian las distintas calidades. Cada tipo de pelo responde de una forma diferente.
En acuarela, muchos artistas prefieren el pincel redondo que es el más versátil y el más característico.
Los pinceles carrados son los que tienen todos los pelos de igual longitud y alineados perfectamente. Son ideales para perfilar contornos y hacer una pintura plana.
Los de lengua de gato o almendrados tienen el pelo cortado haciendo una suave curva. Ideales para utilizar la virola paralela al papel y de redondear si le damos vuelta.
Las brochas o paletinas tienen la virola ancha y alargada. Se utilizan para hacer fondos y grandes lavados.
La numeración de pinceles van desde el Nº 000, que es el más fino hasta el Nº 24 que es el más grueso.